¿Qué son los queloides y cómo se forman?

Los queloides son cicatrices elevadas y desproporcionadas que se forman después de una lesión en la piel. Se producen cuando hay un exceso de colágeno en la zona de la cicatrización, lo que provoca que la piel se espese y se eleve por encima del nivel de la piel circundante.

Los queloides pueden aparecer por diversas causas, pero su formación es más común después de una lesión que ha penetrado la piel, como una abrasión, quemadura, incisión o sutura. También pueden aparecer como consecuencia de una cirugía estética o como resultado de una vacunación o inyección de cortisona.

¿Qué factores influyen en la aparición de queloides?

Hay varios factores que influyen en la aparición de queloides. Los más relevantes son:

• La genética: algunas personas tienen más predisposición que otras a formar queloides debido a la forma en que su cuerpo produce colágeno.
• La ubicación de la lesión: las zonas con mayor tensión como la espalda o el pecho son más propensas a desarrollar queloides.
• La gravedad de la lesión: cuanto más grave sea la lesión, mayor será la probabilidad de que se forme un queloide.
• La edad: los queloides son más comunes en personas menores de 30 años.

¿Cómo prevenir la formación de queloides?

La prevención es la clave para evitar la formación de queloides. Hay varias medidas que se pueden tomar para prevenir la formación de cicatrices queloides.

Mantén la herida limpia y cubierta adecuadamente

Es importante mantener la herida limpia y cubierta adecuadamente para evitar la entrada de bacterias y otros agentes que pueden aumentar la inflamación y retrasar el proceso de cicatrización. Además, las heridas expuestas al sol pueden tardar más tiempo en cicatrizar y aumentar el riesgo de formación de queloides.

Aplica compresas frías

Aplicar compresas frías en la zona afectada puede ayudar a reducir el flujo sanguíneo e inflamación, lo que disminuye el riesgo de desarrollar queloides. Se recomienda aplicar compresas frías durante los primeros días después de la lesión.

Evita fumar y consumir alcohol

Tanto el tabaquismo como el consumo excesivo de alcohol pueden aumentar el riesgo de formación de queloides. Además, estas sustancias pueden reducir la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos, lo que puede retrasar el proceso de cicatrización.

Evita la exposición al sol excesiva

La exposición al sol puede aumentar el riesgo de formación de queloides. Se recomienda evitar la exposición al sol directo y utilizar protección solar adecuada para evitar la aparición de nuevas cicatrices.

Alimentación para prevenir la formación de queloides

Una dieta saludable y rica en nutrientes puede ayudar a prevenir la formación de queloides. Los siguientes alimentos son especialmente beneficiosos:

• Frutas y verduras: ricas en antioxidantes y vitaminas C y E, que promueven la producción de colágeno y ayudan a la piel a sanar más rápidamente.
• Proteínas magras: como pollo, pescado y tofu, que contienen los aminoácidos necesarios para la producción de colágeno y reparación celular.
• Granos enteros: como arroz integral, avena y quinoa, que contienen una gran cantidad de fibra y nutrientes beneficiosos para la salud de la piel.
• Frutos secos y semillas: como almendras, nueces y lino, que son ricas en ácidos grasos esenciales que promueven la producción de colágeno y mantienen la piel bien hidratada.

Tratamientos para reducir la apariencia de los queloides

Si a pesar de tus esfuerzos de prevención, aún desarrollas un queloide, existen tratamientos que pueden ayudar a reducir su apariencia. Los siguientes tratamientos pueden ser efectivos:

• Cremas y geles: puede aplicarse una amplia variedad de cremas y geles que contengan ingredientes que reduzcan la inflamación y aceleren la curación y reduzcan el tamaño del queloide.
• Vendajes de presión: se pueden aplicar vendajes de presión en la zona afectada para reducir la elevación del queloide.
• Inyecciones de cortisona: una inyección de cortisona puede reducir la inflamación y el tamaño del queloide.
• Cirugía: en algunos casos, puede ser necesario recurrir a la cirugía para eliminar el queloide. Sin embargo, este tratamiento puede ser invasivo y traer consecuencias negativas, por lo que debería ser una opción solo si otros tratamientos no han funcionado.
• Láser: la terapia con láser puede reducir la apariencia del queloide al minimizar la multiplicación del colágeno en la zona de la cicatriz.

Conclusión

Evitar la formación de queloides puede ser posible si tomamos las medidas necesarias para prevenirlas. Mantener una alimentación saludable, tener precaución en el cuidado de las heridas, evitar hábitos no saludables, y tomar las medidas necesarias para proteger la piel de la exposición solar y otros factores de inflamación puede ser muy efectivo. En caso de desarrollar queloides, tratamientos como cremas, inyecciones de cortisona, láser, cirugía, y vendajes pueden ayudar en la reducción de la apariencia de los mismos.