El eczema es una condición de la piel que afecta a millones de personas en todo el mundo. Esta afección es más común en niños, pero también puede afectar a adultos de todas las edades. El eczema puede ser una afección crónica que puede ser muy frustrante y dolorosa.
La causa exacta del eczema aún no se conoce. Sin embargo, se sabe que existen varios factores que pueden desencadenar la afección. Uno de los principales factores es la genética, donde algunas personas pueden ser más susceptibles al eczema que otras.
La exposición a ciertos irritantes también puede desencadenar el eczema. Estos irritantes pueden incluir detergentes, jabones, productos químicos y polvo. También se sabe que el eczema se relaciona con los cambios hormonales y el estrés emocional.
Los síntomas del eczema pueden variar de persona a persona. En muchos casos, se presenta con parches de piel seca que pueden causar picazón intensa. Estos parches pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero son más frecuentes en manos, muñecas, cara, cuello y piernas.
En algunos casos, el eczema puede causar ampollas y llagas en la piel, lo que puede provocar dolor y aumentar el riesgo de infección.
Otro síntoma común es la inflamación de la piel, lo que puede hacer que la piel se vuelva gruesa y áspera.
En situaciones más severas, el eczema puede causar daño nervioso y dificultar el sueño de las personas afectadas.
Si bien no existe una cura para el eczema, existen varios tratamientos disponibles que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la enfermedad. Uno de los tratamientos más comunes es el uso de cremas tópicas que contienen esteroides, que pueden ayudar a reducir la inflamación y la picazón.
Los pacientes también deben evitar cualquier irritante conocido que pueda desencadenar los brotes de la enfermedad. Por ejemplo, evitar jabones perfumados y detergentes.
Para aquellos que experimentan una serie de reacciones alérgicas, identificar y evitar los desencadenantes alimentarios específicos y alérgenos puede ser útil. Las opciones incluyen huevos, leche, productos de trigo,exposición a mascotas como el pelo de gato y también ácaros de polvo doméstico.
Los pacientes también pueden beneficiarse de técnicas de relajación para controlar el estrés emocional, como el ejercicio y la meditación.
Si bien no se puede prevenir el eczema, puedes reducir el riesgo de tener un brote. Va a depender de cada persona pues puede surgir por diferentes motivos en cada caso individual.
Evita los irritantes conocidos que provocan brotes y mantén la piel limpia e hidratada. No compartas toallas o elementos de higiene personal. Evita mantener la piel húmeda durante demasiado tiempo, es importante después de ducharte secar la piel inmediatamente.
Mantén una dieta balanceada y reduce los niveles de estrés emocional.
El eczema es una afección de la piel que puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas afectadas. Si bien no existe una cura para la enfermedad, los tratamientos están disponibles para ayudar a controlar los síntomas.
La mejor manera de prevenir y controlar el eczema es identificar cualquier posible desencadenante, mantener la piel limpia e hidratada, evitar el estrés emocional y mantener una dieta saludable y equilibrada.
Si tu eczema es severo, lo mejor es acudir a un especialista para recibir tratamiento adecuado y manejo.